Las obras que componen este concierto han sido elegidas para presenciar un diálogo entre dos estéticas musicales que, si bien son muy diversas en sí mismas, presentan identidades propias y se corresponden con dos de los momentos históricos más notables de la historia del órgano. Por un lado, la primera parte del programa está protagonizada por autores barrocos, con una representación selecta de música española, norte alemana e italiana. Por otro, la segunda parte del programa es una muestra de compositores del periodo clásico, encabezada por uno de los precursores de este estilo, Carl Philipp Emanuel Bach, para continuar después con tres autores españoles que protagonizaron el panorama musical ibérico de su tiempo.

Este singular concierto de Silvia Márquez al órgano y Matthijs Koene con la flauta de pan nos permitirá descubrir la combinación de los tubos de la flauta de pan y los del órgano que ofrecen una amplia variedad de colores, se complementan, contrastan entre sí pero también pueden fundirse por completo: la flauta de pan actúa como un registro expresivo del órgano. Ambos continúan expresando las mismas pasiones presentes en la mitología griega, mostrando el poder de lo primitivo: del sentimiento más dulce o el doloroso lamento hasta el desgarro con la más atronadora potencia.

El organista Jonathan William Moyer presenta así el programa de este concierto : He estado largo tiempo seducido por el efecto embriagador del himno "O Nata Lux" de Thomas Tallis: su elegante contrapunto, su armonía cautivadora y su texto profundamente simbólico.
O nata lux de lumine, Oh luz nacida de la luz,
Jesu redemptor saeculi, Jesús, redentor del mundo,
Dignare clemens supplicum, Dígnate, clemente, recibir
Laudes precesque sumere. Las alabanzas y plegarias de tus siervos.
Así surgió el impulso para este programa y mi propio conjunto de variaciones. "Clemens supplicum" es ese espacio en el que la humildad engendra misericordia y la oración se transforma en adoración.

Las obras de música de cámara compuestas por Johann Sebastian Bach fueron sin duda muchas más que las que conocemos hoy. A su muerte, los manuscritos fueron heredados por su hijo menor Johann Christian, cuyos gustos musicales, sin embargo, se habían inclinado hacia un estilo más galante y moderno. Estas composiciones se dejaron de lado y muchas desaparecieron. Entre estas obras, muchas estaban dedicadas al violín, instrumento que Bach tocaba a la perfección.
Aunque el autógrafo se ha perdido, afortunadamente se ha conservado una copia de la colección de seis sonatas para violín y clave concertato, una colección magistral de composiciones en las que al violín se une el clave, no en el papel habitual de acompañamiento (el llamado bajo continuo, en el que el clavecinista añade armonías a una línea de bajo escrita por el compositor), sino en un papel solista.

El centro del concierto serán las piezas a dos órganos del Archivo de la Catedral de Cuenca. Una selección de piezas inéditas, en algunos casos no catalogadas, harán el deleite en este concierto. Esta música de escritura virtuosa, al tiempo que intrínsecamente unida a la liturgia, nos muestra  mejor que ninguna otra la esencia musical más genuina de los órganos de Julián de la Orden.

Contra los engaños del demonio y las penas del infierno 
Miracles de Nostre Dame de Gautier de Coinci (1178-1236) y Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio (1221-1284)
Un concierto de Carles Magraner y Capella de Ministrers

Pack descuento que incluye las 4 visitas

   - Catedral de Cuenca (con opción de incluir visita nocturna en días concretos)
   - Triforio
   - Museo del Tesoro
   - San Pedro y Torre

Ser Amigo de la Catedral de Cuenca supone participar activamente en la conservación y restauración de este impresionante legado patrimonial. Cada aportación, ya sea de personas particulares, establecimientos de hostelería, comercios o de entidades, supone una ayuda de vital importancia para garantizar la pervivencia de un legado histórico clave en el pasado, presente y futuro de la humanidad.

Una maravilla por descubrir, un lugar único en el mundo. Más de 800 años de historia de la arquitectura y el arte.

Levantada sobre una antigua mezquita llama la atención por su planta octogonal al exterior que se torna en circular en el interior